miércoles, 15 de septiembre de 2010

¿Si hablamos de Literatura?

La literatura en su abstracta y magnificente complejidad.
¿Es la Literatura algo que nos lleva acompañando desde el inicio de nuestra cultura?
Ha influido, ha marcado, ha contrarestado la Historia. La Historia de un mundo lleno de un sinfín de incongruencias y blasfemias que la Literatura ha intentado corregir.
Sí, es cierto que la actitud de la Literatura no ha gozado siempre de una finalidad social (Y cuando lo ha hecho, ha caído, en numerosas ocasiones, en una falta de perfección literaria). Pero la Literatura es, para algunos, un reducto, una fortaleza infranqueable a la cual se aferran férreamente desde Homero hasta Neruda, pasando por Calderón y continuando con Defoe.
Pero la Literatura no solo es el baluarte intelectualoide de los grandes entre los literatos.
La Literatura ha abarcado, abarca y abarcará a todo aquel que sienta o la haya sentido.
Todo aquel que lee un libro, que se intenta evadir de la realidad (horrible o armoniosa) que le ha tocado vivir; aquel que se decide en el arduo trabajo de la creación literaria, es alguien que encuentra en las letras un abatimiento del realismo vivido.

Un libro es más que un objeto. Aquel que alguna vez ha amado un libro, nunca más verá a la Literatura en sí como algo meramente tangible mediante las páginas y los escritos.
El que ha amado un libro descubre ante sí, un amigo, un apoyo, una evasión. Desarrolla una amistad inerte con la literatura.
Empezando a escribir metamorfoseas. Llega el momento en que ves a cada oración una complejidad en armonía. La oración pasa a ser un rompecabezas, que tienes que resolver para admirar su perfección. En el momento que comienzas a intentar hacer literatura pasas de un hobby a una necesidad. Escribir pasa a ser como respirar, como comer o leer.

Las letras forman palabras, las palabras forman oraciones, y las oraciones hojas. Y todo ese conjunto, en total servilismo al Arte forman un libro.
Los libros, han formado la literatura de un mundo.
Esos libros, a través de la Literatura, han escrito también la historia. Una historia escrita por los habitantes de los tiempos.
La Literatura es la claraboya a la cual asomarse para conocer la verdadera procedencia de nosotros mismos. La claraboya que nos demuestra el esplendor repulsivo del hombre.
La Literatura culmina la intrahistoria de un mundo recogido en las infinitas estanterías dispuestas en escrupuloso orden en la biblioteca de Cronos.
La biblioteca del Mundo, la biblioteca de Cronos, te permitirá sentarte en los barrigudos sillones orejeros de cuero a disfrutar del placer del saber. Absorbe el olor que impregnan las páginas: Una mezcla de manos, dedos, tintas, papel, polvo, historia, sangre... Todo ello en perfecto maridaje.
Mantengamos esos libros intactos. Sigamos creando literatura, preservemos el olor a papel y polvo viejo… Mantengamos ante nosotros una historia cercana a la doliente realidad. Mantengamos intacta la intrahistoria de verdad.

1 comentario:

  1. yo tengo 2 libros que nunca me cansare de leer, siempre que me sumerjo en ellos, encuentro la paz y siento nostalgia por aquellos personajes que siempre me esperan entre sus paginas. estoy totalmente de acuerdo en que, la literatura nos sirve para conocer la procedencia de nosotros mismos y,en cierto modo, que nos conozcan. un saludo Eduardo! hasta pronto. un saludo de Coquette

    ResponderEliminar